Autor: Kyung-Sook Shin
Páginas: 237
Formato: Tapa blanda con solapas
Editorial: Grijalbo
Kyung-Sook Shin (1963) es una escritora sur coreana, reconocida como la primera mujer y primera escritora de Corea del Sur en ser galardonada con el Man Asian Literary Prize en su versión 2011, el cual se concede a escritores asiáticos desde 2007.
Para ti, mamá era siempre mamá. Nunca se te pasó por la cabeza que un día había dado su primer paso, o que había tenido tres, doce o veinte años. Mamá era mamá. Había nacido mamá. Hasta que la viste correr de ese modo hacia tu tío, no caíste en la cuenta de que era un ser humano que sentía exactamente lo mismo que tú por tus hermanos, y ese descubrimiento te llevó a tomar conciencia de que ella también había tenido infancia.
La historia. So-nyo, de 69 años,
se separa de su esposo en una concurrida estación del metro de Seúl y
desaparece entre la multitud. Sus cuatro
hijos, desesperados por este infortunio, se recriminan entre sí y discuten por
las cosas más insignificantes, hasta que se dan cuenta que nadie tiene una foto
reciente de su madre y en realidad no conocen nada de ella, nada que pueda
ayudarlos a encontrarla.
Mi opinión. Shin narra la
historia alternando los puntos de vista entre dos de los hijos de So-nyo y la de
su esposo, juntos componen una trama enternecedora y a la
vez desesperante que nos llevará a través de las alegrías y sinsabores de la
vida de una abnegada madre.
La autora utiliza la segunda persona, recurso que nos involucra aún más
en la desesperación de la búsqueda y en el sentimiento de culpa de los
protagonistas. La mayoría de las
situaciones nos lleva a algún tipo de descubrimiento sobre la madre o alguna
verdad oculta de los hijos.
A través de los hallazgos de sus hijos, So-nyo termina por revelarse como
un ser humano independiente de su papel como madre, como una mujer con
identidad propia y esto, más que otras cosas, asombra a su familia. No es que no fuera la madre que creían, es
que era mucho más, más abnegada y sacrificada de lo que intuían y mucho más
mujer de lo que dejaba ver. Las cosas
que aguantó y las cosas que sufría en silencio me estuvieron al borde de las
lágrimas.
Los hijos narradores se van dando cuenta (y los otros en segundo plano)
que han descuidado a su madre y hacen todo tipo de compromisos para ser mejores
cuando ella aparezca, pero todos dudan si tendrán esa oportunidad. Shin apela a todos nosotros, a ese
sentimiento de si estamos haciendo (o si hicimos) lo correcto por nuestras
madres.
Por favor, cuida de mamá habla de la familia, de las cosas que no se
dicen por temor a incomodar y de cómo hasta en la desgracia hay redención.
¿Han leído a otros sur coreanos? Este fue mi primero y me gustaría leer más.
Hasta la próxima y que tengan buena lectura.
Marieru
Me parece un libro muy emotivo narrado con sensibilidad que recomiendo a todo el mundo
ResponderEliminarLo tengo pendiente por casa =)
ResponderEliminarBesotes
Yo también lloraría con este libro, le tengo ganas n.n
ResponderEliminarBesos!
Hola, acabo de conocer tu blog por casualidad, me gusta y me quedo como seguidora, pues veo que tenemos algunas lecturas en común, te invito a seguir mi blog si te gusta,para así poder estar más en contacto e intercambiar opiniones.
ResponderEliminarTambién he visto que estás leyendo La chica mecánica, ya nos contarás que te parece porque yo lo encontré un poco raro y lioso en algunos tramos. Un beso.
Hola, Isabel!
EliminarEs la misma impresión que tengo de La chica mecánica, ya veremos que tal termina.
Besos
Yo te cuento que sufro de mamitis aguda, de seguro lloro con él pero me agrada la idea :)
ResponderEliminarMe encanta tus reseñas, un beso.